34. Enfermería en cirugía cardiovascular
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La enfermería en cirugía cardiovascular es una especialidad que requiere conocimientos profundos y habilidades técnicas avanzadas. Las enfermeras que trabajan en esta área desempeñan un papel vital a la hora de brindar atención médica de alta calidad a pacientes sometidos a procedimientos cardiovasculares, desde la evaluación preoperatoria hasta la atención postoperatoria y la rehabilitación.
Antes del procedimiento quirúrgico, la enfermera cardiovascular es responsable de evaluar el estado de salud del paciente, explicar el procedimiento y sus riesgos y preparar al paciente y a su familia para la cirugía. Esto puede incluir realizar exámenes físicos, realizar un historial médico, administrar medicamentos preoperatorios y coordinar con otros miembros del equipo de atención médica.
En el quirófano, la enfermera cardiovascular realiza varias funciones, dependiendo de su rol específico. La enfermera circulante coordina el entorno operativo, garantizando la seguridad del paciente y la eficiencia de los procedimientos. La enfermera de instrumentación trabaja directamente con el cirujano y le pasa instrumentos y suministros según sea necesario. La enfermera de anestesia supervisa el estado del paciente durante la cirugía, administrando anestésicos y ajustando la dosis según sea necesario.
Después de la cirugía, la enfermera cardiovascular cuida al paciente en la unidad de cuidados intensivos (UCI), monitorea los signos vitales, administra medicamentos, ayuda con la ventilación mecánica y brinda otros cuidados críticos según sea necesario. La enfermera también desempeña un papel importante en la educación del paciente y su familia sobre los cuidados postoperatorios, incluida la administración de medicamentos, el cuidado de las heridas y la rehabilitación.
Además de estas responsabilidades clínicas, la enfermera cardiovascular también puede participar en actividades de investigación y enseñanza. Pueden realizar estudios para mejorar la atención a los pacientes cardiovasculares, desarrollar e implementar protocolos de atención basados en evidencia y enseñar a otros profesionales de la salud sobre las mejores prácticas en enfermería cardiovascular.
Para convertirse en enfermero de cirugía cardiovascular, debe tener una sólida formación en enfermería, incluida una licenciatura en enfermería (BSN) y una licencia de enfermería registrada (RN). Además, la mayoría de los empleadores exigen que las enfermeras tengan experiencia en cuidados críticos y obtengan una certificación en soporte vital cardiovascular avanzado (ACLS).
Además, muchas enfermeras optan por obtener una certificación especializada en enfermería cardiovascular para demostrar sus conocimientos y habilidades en esta área. Esta certificación la ofrecen varias organizaciones profesionales, incluida la Junta Estadounidense de Medicina Cardiovascular y la Asociación Estadounidense de Enfermeras de Cuidados Críticos.
En resumen, la enfermería en cirugía cardiovascular es una especialidad compleja y desafiante que requiere un alto nivel de conocimiento y habilidades técnicas. Sin embargo, también es un área extremadamente gratificante ya que permite a las enfermeras marcar una diferencia significativa en las vidas de los pacientes sometidos a procedimientos cardiovasculares.
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