16.3. Período de entreguerras y crisis de 1929: auge de la Segunda Guerra Mundial
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El período de entreguerras, que duró de 1918 a 1939, fue una época de tensión y conflicto que culminó en la Segunda Guerra Mundial. Durante este período, el mundo experimentó una serie de cambios políticos, económicos y sociales que marcaron el curso de la historia.
Uno de los acontecimientos más significativos de este período fue la crisis de 1929, también conocida como la Gran Depresión. La crisis comenzó en Estados Unidos con la caída del mercado de valores de Wall Street y rápidamente se extendió al resto del mundo. La economía mundial colapsó, el desempleo se disparó y la pobreza se extendió.
La crisis de 1929 fue causada por varios factores. Uno de los principales fue la excesiva especulación en bolsa. Los inversores compraban acciones a precios inflados, con la esperanza de que siguieran subiendo. Cuando estalló la burbuja, muchos lo perdieron todo. Otro factor fue la falta de regulación gubernamental. Los bancos prestaban dinero imprudentemente y las empresas producían más bienes de los que la gente podía comprar.
La crisis tuvo un impacto devastador en la economía global. La producción industrial cayó, el comercio internacional disminuyó y el desempleo aumentó. Muchos países han adoptado políticas proteccionistas, imponiendo aranceles elevados a los bienes importados para proteger sus propias industrias. Sin embargo, esto sólo exacerbó la crisis, ya que redujo el comercio e impidió la recuperación económica.
En medio de la crisis, surgieron líderes autoritarios que prometieron restaurar el orden y la prosperidad. En Alemania, Adolf Hitler y el Partido Nazi llegaron al poder. Culparon a judíos y comunistas por la crisis y prometieron restaurar la grandeza de Alemania. En Italia, Benito Mussolini y el Partido Fascista tomaron el poder. Prometieron restaurar el orden y la grandeza en Italia a través de un gobierno fuerte y autoritario.
El ascenso de estos líderes autoritarios condujo al estallido de la Segunda Guerra Mundial. Hitler invadió Polonia en 1939, provocando la guerra. Luego invadió otros países de Europa, incluidos Francia, Bélgica y los Países Bajos. Mussolini también expandió el imperio italiano, invadiendo Etiopía y Albania.
La Segunda Guerra Mundial fue un conflicto global que involucró a más de 30 países y resultó en la muerte de más de 60 millones de personas. Fue la guerra más mortífera de la historia y tuvo un profundo impacto en el mundo. La guerra terminó con la derrota de las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón) por las potencias aliadas (principalmente la Unión Soviética, Estados Unidos y el Reino Unido).
Al final de la guerra, el mundo estaba en ruinas. Las ciudades fueron destruidas, las economías devastadas y millones de personas fueron desplazadas. Sin embargo, la guerra también provocó cambios importantes. Condujo a la creación de las Naciones Unidas, diseñadas para prevenir conflictos futuros. También condujo al comienzo de la Guerra Fría, un período de tensión y conflicto entre Estados Unidos y la Unión Soviética.
En resumen, el periodo de entreguerras y la Crisis de 1929 fueron tiempos de gran tensión y conflicto. Dieron forma al curso de la historia y tuvieron un profundo impacto en el mundo. Comprender estos eventos es crucial para comprender el mundo en el que vivimos hoy.
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