Los operadores relacionales son una parte fundamental de la lógica de programación, ya que permiten a los programadores hacer comparaciones entre variables, constantes y expresiones. Estas comparaciones son esenciales para construir estructuras condicionales y repetitivas, que son las piedras angulares de la lógica de programación. En este capítulo, exploraremos los operadores relacionales desde los básicos hasta los avanzados.
Hay seis operadores relacionales básicos que son comunes en la mayoría de los lenguajes de programación: igual (==), distinto de (!=), mayor que (>), menor que (<), mayor o igual (>=) y menor o igual a (<=). Estos operadores se utilizan para comparar dos valores y devolver un valor booleano (verdadero o falso) dependiendo del resultado de la comparación.
El operador de igualdad (==) compara si dos valores son iguales. Por ejemplo, la expresión (5 == 5) devolverá verdadero, mientras que la expresión (5 == 4) devolverá falso. Es importante tener en cuenta que el operador de igualdad es diferente del operador de asignación (=), que se utiliza para asignar un valor a una variable.
El operador de desigualdad (!=) compara si dos valores son diferentes. Por ejemplo, la expresión (5 != 4) devolverá verdadero, mientras que la expresión (5 != 5) devolverá falso.
El operador mayor que (>) y el operador menor (<) comparan si un valor es mayor o menor que el otro, respectivamente. Por ejemplo, la expresión (5 > 4) devolverá verdadero, mientras que la expresión (4 > 5) devolverá falso. Asimismo, la expresión (4 < 5) devolverá verdadero, mientras que la expresión (5 < 4) devolverá falso.
El operador mayor o igual que (>=) y el operador menor o igual que (<=) funcionan de manera similar a los operadores mayor que y menor que, pero también devuelven verdadero si los dos valores comparados son igual. Por ejemplo, la expresión (5 >= 5) devolverá verdadero, mientras que la expresión (4 >= 5) devolverá falso. Asimismo, la expresión (5 <= 5) devolverá verdadero, mientras que la expresión (5 <= 4) devolverá falso.
Los operadores relacionales se utilizan a menudo en combinación con operadores lógicos (como AND, OR y NOT) para crear expresiones más complejas. Por ejemplo, la expresión ((5 > 4) AND (3 < 4)) devolverá verdadero, porque ambas condiciones son verdaderas. Asimismo, la expresión ((5 > 4) OR (5 < 4)) también devolverá verdadero, porque al menos una de las condiciones es verdadera. La expresión NOT (5 > 4) devolverá falso, porque la condición (5 > 4) es verdadera.
Los operadores relacionales también son esenciales para crear estructuras condicionales (como IF, ELSE y SWITCH) y estructuras repetitivas (como FOR, WHILE y DO WHILE). Estos marcos permiten a los programadores controlar el flujo de ejecución del programa haciendo que ciertos bloques de código se ejecuten solo cuando se cumplen ciertas condiciones.
Por ejemplo, la siguiente estructura IF en pseudocódigo:
SI (5 > 4) ENTONCES IMPRIMIR "5 es mayor que 4" TERMINARA SI
imprimirá "5 es mayor que 4" porque la condición (5 > 4) es verdadera. Asimismo, la siguiente estructura WHILE en pseudocódigo:
MIENTRAS (i < 5) HACER IMPRIMIR yo yo = yo + 1 FINAL
imprimirá los números del 0 al 4, porque el bloque de código dentro de WHILE se repetirá siempre que la condición (i < 5) sea verdadera.
En resumen, los operadores relacionales son una herramienta poderosa en la programación lógica, que permite a los programadores hacer comparaciones entre valores y controlar el flujo de ejecución del programa. Son la base para construir estructuras condicionales y repetitivas, que son esenciales para crear programas complejos y funcionales.