La discreción es un atributo esencial para un profesional de seguridad inmobiliaria. Es la capacidad de mantener la información confidencial, no llamar la atención innecesaria y actuar de manera silenciosa y eficiente. Este capítulo explorará la importancia de la discreción en la seguridad de activos y cómo se puede desarrollar y mejorar.
La seguridad de los activos implica proteger a las personas, la propiedad y la información. En muchos casos, el trabajo implica acceder a información sensible y confidencial. Por lo tanto, la discreción es esencial para garantizar que esta información no se divulgue de manera inapropiada. Esto puede comprometer la seguridad de las personas y los bienes que se protegen y puede tener consecuencias legales y profesionales graves.
La discreción también es importante para un trabajo de seguridad eficaz. Un guardia de seguridad debe poder observar y controlar sin llamar la atención. Esto les permite detectar actividades sospechosas o peligrosas sin alertar a posibles infractores. La discreción también es crucial durante situaciones de crisis, donde se requiere una acción calmada y eficiente para resolver la situación sin causar alarma o pánico innecesarios.
Además, la discreción contribuye a la imagen profesional de un guardia de seguridad de propiedad. Un profesional discreto es visto como confiable, competente y de buena reputación. Esto puede aumentar la confianza y el respeto de los clientes, colegas y el público en general, haciendo que el trabajo de seguridad sea más efectivo.
Entonces, ¿cómo puede un guardia de seguridad desarrollar y perfeccionar su discreción? Primero, es importante comprender y respetar la confidencialidad. Esto significa no compartir información confidencial, ni siquiera con amigos o familiares, y utilizar la información únicamente para el fin previsto. También es importante ser reservado y profesional en todas las interacciones, evitando chismes, comentarios innecesarios o comportamientos llamativos.
En segundo lugar, un guardia de seguridad debe desarrollar buenas habilidades de observación y seguimiento. Esto incluye la capacidad de permanecer alerta sin llamar la atención, ver sin ser visto y detectar actividades sospechosas sin alertar a los infractores. Esto se puede lograr mediante capacitación y práctica, así como mediante el uso de tecnología de seguridad, como cámaras y sistemas de alarma.
Por último, pero no menos importante, un guardia de seguridad de propiedad debe aprender a mantener la calma y actuar de manera eficiente en situaciones de crisis. Esto requiere formación en gestión de crisis, habilidades de comunicación y toma de decisiones bajo presión. La capacidad de actuar discretamente en una crisis puede ayudar a resolver la situación de forma rápida y segura, minimizando la alarma y el pánico.
En conclusión, la discreción es una habilidad esencial para un guardia de seguridad. Ayuda a proteger la información confidencial, aumenta la eficacia del trabajo de seguridad, contribuye a una imagen profesional y es crucial en situaciones de crisis. Desarrollar y mejorar la discreción debe ser una prioridad para cualquier profesional de seguridad inmobiliaria.