En el capítulo 10.10 de nuestro libro electrónico, cubriremos uno de los aspectos más críticos de la construcción de una casa: la construcción de las paredes. Este proceso no se trata sólo de erigir estructuras, sino que también implica una serie de reglas y regulaciones que deben seguirse para garantizar la seguridad y durabilidad del edificio.
Normas y reglamentos para la construcción de muros
Los estándares y regulaciones para la construcción de muros varían según el país y la región, por lo que es esencial que conozca las leyes locales antes de comenzar la construcción. En Brasil, por ejemplo, la Associação Brasileira de Normas Técnicas (ABNT) es el organismo responsable de elaborar las normas técnicas que regulan la construcción civil, incluida la construcción de muros.
La norma NBR 6118:2014, por ejemplo, establece los requisitos y criterios de diseño para estructuras de hormigón, mientras que la NBR 6120:1980 establece las cargas para el cálculo de estructuras de edificación. Estas normas, entre otras, deben seguirse para garantizar la seguridad y calidad de la construcción.
Construyendo los muros
La construcción de las paredes de una casa es un proceso que involucra varios pasos. En primer lugar es necesario preparar el terreno, procurando que esté nivelado y libre de obstáculos. Luego se excavan los cimientos, que servirán de base para los muros.
Después de los cimientos, viene el paso de levantar los muros. Este proceso suele comenzar con la construcción de los cimientos, los cuales son de hormigón y sirven para distribuir el peso de la casa sobre el terreno. A continuación se construyen los muros, que pueden ser de diferentes materiales, como ladrillo, hormigón, madera, entre otros.
Los muros deben construirse de acuerdo al proyecto arquitectónico, respetando las dimensiones y disposición de ventanas y puertas. Además, es importante asegurarse de que las paredes estén perfectamente alineadas y niveladas, para evitar problemas futuros.
Revestimiento y acabado
Después de la construcción de los muros viene la etapa de revestimiento y acabado. El revestimiento es una capa que se aplica a la pared para protegerla y darle un aspecto más agradable. Puede estar fabricado de diferentes materiales, como mortero, yeso, pintura, entre otros.
El acabado, a su vez, es la etapa final de la construcción del muro. Incluye pintura, colocación de azulejos o papel pintado, instalación de rodapiés, entre otros detalles que le dan el toque final a la pared.
Es importante recordar que tanto el revestimiento como el acabado deben realizarse de acuerdo con las normas y regulaciones locales, para garantizar la seguridad y durabilidad de la construcción.
Conclusión
La construcción de las paredes de una casa es un proceso complejo que requiere conocimiento y experiencia. Además, es fundamental seguir las normas y regulaciones locales para garantizar la seguridad y la calidad de la construcción. Por ello, si estás pensando en construir tu propia casa, te recomendamos que contrates a un profesional cualificado para que te ayude en este proceso.
En el próximo capítulo de nuestro libro electrónico, cubriremos otro aspecto importante de la construcción de una casa: la instalación eléctrica. ¡Estén atentos!